jueves, 4 de marzo de 2010

Dream a little dream of me

Ha pasado mucho tiempo, mucho tiempo desde que te dejé llorando en la alamedaaaaa...

Qué tal mis siempre fieles seguidores, me ausenté de este blog por la escusa más usada de todos los tiempo; por la chamba. Así es, he tenido un chingo, lo cual curiosamente no me molesta, soy de esos seres extraños que prefieren tener días llenos de chamba para que la jornada se pase rapidísimo.

Otra razón (no menos importante) es que durante este tiempo no tenía ni puñetera idea de lo que iba a escribir. Pensé que la iluminación me había abandonado, hasta hace a penas unos días, más bien noches que algo sucedió...

Tuve un sueño más allá de lo extraño... Sí ya sé que TODO el pinche mundo dice que sus sueños son especiales, pero dejando esa parte obvia a un lado, en verdad, en verdad os digo, que tuve el sueño más pinche raro de TODO el universo.
Mi sueño fue tan bizarro que psicólogos pagarían por analizarlo. Así de cabrón estuvo. Pero soy un alma que obra de buena fe, por ende, no cobraré por compartir mi retorcido inconsciente de manera gratis.

Ya... sin preámbulos...

Soñé que El Hombre Elefante se había enamorado de una mujer muy bella, pero estaba ciega. Como era un ser horripilante y boludo y había osado mancillar a la noble mujer ciega, (porque que quede claro, en mi sueño estos dos parchaban sin cesar), por ello el pueblo ignorante del siglo XIX había armado una revolución para acabar con EL Hombre Elefanteeeeee...

Y yo qué hacía en el sueño... Al principio no hacía ni madres, era como una espectadora de una película, pero después me convertía en la clave que iba a ayudar a que el amor de aquéllos dos se realizara. Yo era una guardia que liberaba al hombre elefante y lo dejaba escapar con su mujer invidente. Todo iba a salir bien...Peroooooooo

Justo al llegar al barco donde huirían, salió una masa de hombres enfurecidos. Uno de ellos llevaba un pinche machete con el que voló medio rostro de la bella mujer ciega. El cacho de cara salió disparado y cayó en la sucia arena. Lo qué pasó a continuación me dejó sin aire. El Hombre Elefante se cercenó una bola de su rostro y se puso el cacho de cara de su amada. Finalmente el amor no triunfó y el "fenómeno" y la bella invidente, murieron a palos. A mí me mataban de un tiro en la cabeza... pero como siempre que sueño que me matan, sigo viva no importa cuantos balazos me acomoden.


Tal vez las nuevas generaciones no sepan quién fue el Hombre Elefante, quizás no sepan de Joseph (John) Merrick. Pues era éste:








Si no saben detalles de su vida les recomiendo ver la película de David Lynch The Elephant Man... aunque es una versión muy dramatizada de la verdadera vida del joven Merrick, vale toda la pena. Y si la película los deja intrigados, Discovery Channel ha hecho documentales que narran la vida de este magnífico ser.

Ayóooooooo

2 comentarios:

Kyerte dijo...

De plano sí estuvo cabrón tu sueño.
De novela por así decirlo. Ni Tim Burton imagina algo así de bizarro me cae de madres.

MIN... dijo...

Que no Tim Burtom ya había hecho una pelicula sobre esto???

Yo recuerdo haberla visto!!
Y que se me hace que esa andabas viendo antes de momir...

Já.. muy buen sueño, para la colección de bizarradas..

Un beso nena...